Las Llaves de los Hoteles

Aunque están en peligro de extinción, todavía son muchos los hoteles que utilizan las tradicionales llaves de metal. Este sistema tiene sus inconvenientes pero también algunas ventajas frente a las modernas llaves de tarjeta.

Es típico que el llavero abulte bastante más que la llave y además éste suele tener bastante peso. El motivo es que sea incómoda de transportar, de tal forma que el cliente nunca olvide entregarla en recepción cada vez que se disponga a salir del hotel y más aún, el día de su salida definitiva. La ventaja para el hotel es que en recepción saben cuando el cliente está en la habitación y cuando no. Esta información es muy útil para el departamento de pisos de cara a organizar el servicio de limpieza. Otra ventaja es que se simplifica el check in o entrada, ya que basta con seleccionar del llavero la llave de la habitación correspondiente y ¡listo!

En cuanto a las llaves de tarjeta, son cómodas, fáciles de usar y el cliente no ha de entregarlas en ningún momento en recepción. La cerradura de este tipo de llaves es mucho más segura, quedando registradas en su memoria todas las aperturas realizadas, incluyendo la hora y el tipo de llave que abrió la puerta. Hay que tener en cuenta, que la puerta de una habitación no sólo la abre la llave que tiene el cliente, sino que, el personal de varios departamentos también tiene acceso a la habitación (botones, servicio de minibar, room service, personal de limpieza etc). El hotel ha de llevar un estricto control de las llaves maestras. Una forma de hacerlo es numerar las llaves y elaborar una ficha de control en la que aparezca el número de llave, la hora de recogida, y el nombre y apellidos del  trabajador. Cuando el personal entregue la llave pondrá la hora de entrega y firmará.

¿Inconvenientes de la llave de tarjeta? Uno muy habitual es que la información contenida en la banda magnética se descarga fácilmente al estar en contacto con el teléfono móvil, la consecuencia es que la tarjeta deja de funcionar. Cuando suceda esto hay que ir a recepción para que la vuelvan a cargar.

Otro inconveniente, en este caso para el departamento de pisos, es el no saber a ciencia cierta cuando el cliente se encuentra en la habitación. Para facilitar esta labor, suele haber un piloto en el pasillo exterior, junto a la puerta de la habitación. Hay que tener en cuenta que la tarjeta que abre la puerta también hace funcionar todo el sistema eléctrico de la habitación. Cuando el sistema esté activado el piloto exterior se iluminará, indicando al personal del hotel que esa habitación es probable que esté ocupada, y digo probable porque algunas veces, el cliente se ha marchado pero dejó cargando la batería del portátil o la de su teléfono móvil y para ello necesita dejar una de las tarjetas en el interruptor eléctrico. 

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